El emprendedor, una especie a proteger
En repetidas ocasiones me he referido al emprendedor como una «especie a proteger». Y si esto lo he venido diciendo en épocas de bonanza económica, sobra decir que en la situación de crisis actual es aún más evidente.
Y es por ello que el equipo ejecutivo con el que cuento en la Cámara de Comercio de Jerez no ha escatimado esfuerzos en crear las mejores condiciones para el afloramiento, desarrollo y consolidación de nuevos emprendedores. Así, bajo el lema de que ninguna idea de negocio caiga en saco roto, hemos hecho del «emprendizaje» una de nuestras líneas estratégicas de actuación.
Para ello, en un primer momento nos alineamos con la Fundación Incyde y sus programas camerales de creación y consolidación empresarial, para así sentar las bases del funcionamiento de nuestro Vivero de Empresas en el Parque Empresarial de la ciudad, generando casi 200 iniciativas empresariales.
Tal es nuestro convencimiento de la necesidad de priorizar el fomento del %u2018emprendizaje%u2019 como estrategia para fortalecer el tejido empresarial, que la entidad está a punto enfrentarse a uno de sus mayores reto en este ámbito: la puesta en marcha de un nuevo Vivero de Empresas que triplica la capacidad del anterior.
Es en este contexto de apuesta decidida de la Cámara de apoyo a los nuevos emprendedores y la escasez de iniciativas empresariales, debido a la frágil situación económica, en el que vemos con esperanza y satisfacción la iniciativa de la Asociación Seniors de Cooperación Técnica (Secot) de colaborar con la entidad en su política de fomento de la creación de empresas, concretándose aún más en servicios directos a esta especie «a proteger» para que ninguna idea de empresa se quede sin desarrollar.