Three Men in a Boat

CARTA DEL EDITOR
Dpto. Comunicación SECOT

En 1889 el escritor británico Jerome K. Jerome publicó el libro que da título a este editorial describiendo unas vacaciones en barco en el río Támesis. El libro fue un éxito y lo sigue siendo más de un siglo después. Su intemporalidad nos permite aprovechar estos meses del verano de 2011 para realizar un viaje en barco disfrutando de la navegación que aprovecharemos para charlar reposadamente. En este viaje seremos cuatro tripulantes; a la caña Jerome que, interesado por Secot, ha querido invitar a Enrique (Puig), a José María (Llorente) y a mí mismo (mi nombre y apellido aparecen al pie del editorial). Jerome es el más senior de todos, basta saber sumar para comprobarlo. Por eso lleva la caña y llevará también la conversación. Pronto embarcaremos y entre nuestros pertrechos vamos a llevar nuestras inquietudes, deseos y propuestas para Secot. Jerome nos ha informado que si nuestra conversación es suficientemente amena, él se hará cargo del cátering. Enrique, José María y yo hemos preparado nuestros “petates” con una breve historia de Secot, algunas ideas para otros seniors y para actuales y futuros emprendedores y alguna cosa más que nuestro anfitrión nos irá preguntando. La escena primera se sitúa en un muelle.

JKJ: ¡Buenos días muchachos! ¿estáis listos para embarcar?

 

E,JM,V: Nosotros estamos, pero ¿lo está Vd? su barca no parece muy nueva, incluso Vd. mismo tampoco tiene aspecto de patrón.

JKJ: ¡Pues sí que empezamos bien! A ver esos petates.

Abrimos obedientemente nuestro equipaje bajo la atenta mirada de Jerome.

JKJ: Muy bien, veo que traéis muchas preguntas: ¿qué es Secot y cuál es su historia? ¿qué cosas ha hecho? ¿qué cosas quiere hacer? ¿en qué consisten las relaciones entre seniors y asesorados? Por cierto; ¿Secot gana dinero? ¿qué recomendáis a los emprendedores españoles ahora?…me parece bien, vamos… ¡subid a bordo!

Largamos amarras y comenzamos a navegar a través de la historia de Secot. A las preguntas de Jerome vamos explicando cómo hace 25 años aproximadamente Lucila intuyó la necesidad de poner en común la experiencia de algunas personas que se estaban jubilando anticipadamente con los deseos de algunas entidades públicas y privadas para promocionar bien la creación o desarrollo de pequeñas empresas o bien para ayudar en determinadas situaciones de exclusión social. Dicha idea se convirtió rápidamente en una realidad apoyada por el Círculo de Empresarios y el Consejo Superior de Cámaras junto con un grupo de personas que animados por Lucila (¡como si fuera posible no seguir la más mínima sugerencia de Lucila!) dieron carta de naturaleza a la asociación. La estructura jurídica y funcional se construyó de forma robusta y a los pocos años varios cientos de seniors ya trabajaban en su tiempo libre desarrollando proyectos destinados a crear empleo para otros.

JKJ: ¿Y por qué trabajan tanto y gratis los seniors españoles?¿es que no les gusta jugar al golf?…    

                       Continuará…